A fin de reducir los cambios negativos que se experimentan por el estrés, necesitamos saber acerca de los diferentes tipos de estrés y cómo reconocerlos. El estrés puede parecer diferente para cada persona y no solo afecta tu cuerpo (estrés corporal) sino que también tus emociones o cómo te sientes (estrés emocional).
El estrés corporal
En los momentos en que estamos estresados, nuestros cuerpos mostrarán señales físicas de tensión ya sea que se trate de estrés corporal o emocional.
Aquí te presentamos una lista de las señales de estrés que tu cuerpo puede producir. Marca cuáles son las que podrías haber experimentado. Por favor también haz una lista a continuación con las demás cosas que sientes en tu cuerpo cuando estás estresado.
- Piel y manos frías o sudorosas.
- Malestar estomacal (cosquilleo en el estómago).
- Ritmo cardíaco rápido o acelerado.
- Pulsaciones no rítmicas.
- Respiración rápida o poco profunda.
- Músculos tensos que no se pueden relajar en la cara, cuello o espalda.
- Piernas o manos que necesitan moverse todo el tiempo.
- No dormir bien, problemas para conciliar el sueño o para permanecer dormido.
- Dolores de cabeza.
- Poca energía o sentirse cansado sin razón alguna.
- Comerse las uñas.
- Sentirse tembloroso.
El estrés mental
A veces un sentimiento perjudicial, la ira, el nerviosismo o la tristeza pueden ser una señal que demuestra que estás estresado. Es posible que tengas dificultad para concentrarte o que sientas que no puedes parar de preocuparte por algo. También puedes sentirte desesperanzado. Estas son señales de estrés mental.
Aquí te presentamos una lista de sentimientos que puedes experimentar cuando te sientes estresado.
Marca cuáles son las que puedes haber experimentado. Por favor también haz una lista a continuación con los demás sentimientos que tienes cuando estás estresado.
- malhumorado,
- irritado con facilidad o al borde de los nervios,
- nervioso, sobresaltado o intranquilo,
- preocupado o ansioso,
- pensamientos acelerados, no se puede parar de pensar acerca de las cosas,
- sensación de estar abrumado,
- atemorizado,
- fuera de control,
- insatisfecho, triste o deprimido,
- gruñón,
- dificultad para concentrarse o tomar decisiones,
- deseos de escapar o huir.